30 abril 2012

27 abril 2012

Curiosidad

Dicen que la curiosidad mató al gato, pero no cuentan si lo que descubrió merecía la pena.

José Saramago

25 abril 2012

Leía

Atticus Finch no hacía nada que pudiera despertar la admiración de nadie: no cazaba, no jugaba al póker, no pescaba, no bebía, no fumaba... Se sentaba y leía.

Matar un ruiseñor, Harper Lee

23 abril 2012

Solitario

Los sentimientos y observaciones del hombre solitario son al mismo tiempo más confusos y más intensos que los de la gente sociable; sus pensamientos son más graves, más extraños y siempre tienen un matiz de tristeza. Imágenes y sensaciones que se esfumarían fácilmente con una mirada, con una risa, un cambio de opiniones, se aferran fuertemente en el ánimo del solitario, se ahondan en el silencio y se convierten en acontecimientos, aventuras, sentimientos importantes. La soledad engendra lo original, lo atrevido, y lo extraordinariamente bello, la poesía. Pero engendra también lo desagradable, lo inoportuno, absurdo e inadecuado.

Muerte en Venecia, Thomas Mann

10 abril 2012

Enemigos

- E iban matando a todos los judíos que encontraban a su paso, y se apoderaban de sus bienes. . . -¿Por qué a los judíos? –pregunté. Y Salvatore me respondió: -¿Por qué no? Entonces me explicó que toda la vida habían oído decir a los predicadores que los judíos eran los enemigos de la cristiandad y que acumulaban los bienes que a ellos les eran negados. Yo le pregunté si no eran los señores y los obispos quienes acumulaban esos bienes a través del diezmo, y si, por tanto, los pastorcillos no se equivocaban de enemigos. Me respondió que, cuando los verdaderos enemigos son demasiado fuertes, hay que buscarse otros enemigos más débiles. Pensé que por eso los simples reciben tal denominación. Sólo los poderosos saben siempre con toda claridad cuáles son sus verdaderos enemigos.

El nombre de la rosa,Umberto Eco

03 abril 2012

Cultura

Por el grosor del polvo en los libros de una biblioteca pública puede medirse la cultura de un pueblo.

John Steinbeck

01 abril 2012

Equivocarse

El único hombre que no se equivoca es el que nunca hace nada.

Johann Wolfgang Goethe